meta name='verify-v1' content='pwiMUB28RJ4hiCr1EXENhHkHqJz4luG0BcIKSmW7UJk=' /> penelope en el paraiso: SER Y PARECER FUERTE PARA SOBREVIVIR

sábado, 8 de agosto de 2009

SER Y PARECER FUERTE PARA SOBREVIVIR


"...en el Lager sucede de otra manera: aquí, la lucha por la supervivencia no tiene remisión porque cada uno está desesperadamente, ferozmente solo. Si un tal Null Achtzehn vacila, no encontrará quien le eche una mano; encontrará más bien a alquien que le eche a un lado, porque nadie está interesado en que un "musulmán"* más se arrastre cada día al trabajo; y si alguno, mediante un prodigio de salvaje paciencia y astucia, encuantra una nueva combinación para escurrirse del trabajo más duro, un nuevo arte que le rente unos gramos más de pan, tratará de mantenerlo en secreto, y por ello será estimado y respetado, y le producirá un beneficio personal; será más fuerte, y será temido por ello, y quien es temido, es, ipso facto, un candidato a sobrevivir.

En la historia y en la vida, parece a veces discernirse una ley feroz que reza: "a quien tiene, le será dado; a quién no tiene, le será quitado". En el Lager, donde el hombre está solo y la lucha por la vida se reduce a su mecanismo primodial, esta ley inicua está abiertamente en vigor, es reconocida por todos. Con los adaptados, con los individuos fuertes y astutos, los mismos jefes mantienen con gusto relaciones, a veces casi de camaradas, porque tal vez esperan obtener más tarde alguna utilidad. Pero a los "musulmanes", a los hombres que se desmoronan, no vale la pena dirigirles la palabra, porque ya se sabe que se lamentarán y contarán lo que comían en su casa. Vale menos aun la pena hacerse amigo suyo, porque no tienen en el campo amistades ilustres, no comen nunca raciones extras, no trabajan en Kommandos ventajosos y no conocen ningún modo secreto de organizarse. Y, finalmente, se sabe que están aquí de paso y que dentro de unas semanas no quedará de ellos más que un puñado de cenizas en cualquier campo no lejano y, en un registro, un número de matrícula vencido. Aunque englobados y arrastrados sin descanso por la muchedumbre innumerable de sus semejantes, sufren y se arrastran en una opaca soledad íntima, y en soledad mueren o desaparecen, sin dejar rastros en la memoria de nadie".


* Nota del Autor: Con el término Muselmann, ignoro por qué razón, los veteranos del campo designaban a los débiles, los ineptos, los destinados a la selección.


Extracto de "Si esto es un hombre", Primo Levi (1917-1987)



En Auchwitz, como en la vida cotidiana, esta máxima es, increíblemente, real.



Foto: Campo de exterminio Auschwitz II-Birkenau, Cracovia, Polonia.

2 comentarios:

Andreilla dijo...

He aquí uno de mis libros favoritos en el mundo. He vuelto de Gredos determinada a empezar la segunda parte (La tregua).

¿Casualidad?!

A.M. Valero Lite dijo...

¿Casualidad que me comprara yo también "La Tregua" a la salida de la guardia en que nos vimos el otro día??? Me está esperando en cuanto termine lo que tengo entre manos.
Bueno, tú ya sabes que las casualidades...no son tal!